La exposición perinatal, incluido el modo de parto y el intervalo de tiempo desde el parto al diagnóstico de infección neonatal son cruciales para diferenciar congénitos de infección perinatal. La infección neonatal suele ser asintomática.
Se realizaron PCR con hisopos nasales y de garganta, esputo y heces de pacientes sintomáticas, incluyendo también a los neonatos pero también torundas vaginales, líquido amniótico, placenta, sangre del cordón umbilical, sangre neonatal o leche materna.
Se realizaron PCR con hisopos nasales y de garganta, esputo y heces de pacientes sintomáticas, incluyendo también a los neonatos pero también torundas vaginales, líquido amniótico, placenta, sangre del cordón umbilical, sangre neonatal o leche materna.
La viremia estuvo presente en el 1% de los adultos sintomáticos. Nosotros identificamos 12 artículos publicados entre el 10 de febrero y el 4 de abril de 2020 que informan sobre 68 partos y 71 recién nacidos con infección materna en el tercer trimestre del embarazo.
La infección se diagnosticó dentro de las 48 horas de vida en 4 casos. Tasas de detección de PCR en tiempo real y la interpretación de los niveles de anticuerpos IgM e IgG en cordón y la sangre neonatal se discute en relación con la inmadurez del sistema inmunitario del feto y el neonato.
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