Los casos de las mujeres más jóvenes con cáncer de mama avanzado se han incrementado un 2% cada año desde mediados de 1970 y no muestran señales de disminuir, según los datos del Instituto Nacional del Cáncer de EEUU. Los resultados, publicados en la edición del miércoles de la revista de la Asociación Médica Americana, confirmaron las sospechas de muchos oncólogos que habían notado un repunte en las pacientes menores de 40 años con cáncer que se ha propagado a los huesos, el cerebro o los pulmones.
En 1976, 1,53 de cada 100.000 mujeres estadounidenses 25 a 39 años de edad fue diagnosticado con cáncer de mama avanzado. Para el año 2009, la tasa casi se había duplicado a 2,9 por cada 100.000 mujeres en ese grupo de edad, una diferencia demasiado grande para ser un resultado fortuito.
La mayoría de los estudios no han podido demostrar un aumento absoluto. Pero ahora, se está claramente registrando un aumento. Es la primera vez que se demuestra. La tendencia, que aún no se ha explicado, ha suscitado preocupaciones reales acerca de los esfuerzos futuros para el tratamiento de la enfermedad. Las tasas de supervivencia para las mujeres jóvenes con cáncer de mama metastásico son mucho menores de lo que son las mujeres mayores, debido a que el cáncer tiende a comportarse de manera más agresiva en las jóvenes.
Sin duda, sigue siendo poco común para una mujer joven ser diagnosticada de cáncer de mama. Aproximadamente el 7% de todos los cánceres de mama diagnosticados en los Estados Unidos involucran a las mujeres menores de 40 años y, en promedio, 1 de cada 173 mujeres en este grupo de edad. La hipótesis de este aumento es que la tendencia era debida a una variedad de cambios de estilo de vida que se han producido durante el período de estudio. La dieta, el ejercicio, la obesidad , el inicio temprano de la menstruación, el uso del control de la natalidad, retraso en el embarazo y otros factores pueden jugar un papel. Unos pocos estudios pequeños han examinado los factores de riesgo tales como la obesidad, el sedentarismo y el consumo calórico alto y llegó a la conclusión de que cuando se combinan, predisponen al cáncer de mama en mujer adulta joven.
Sin embargo, todavía no se sabe exactamente qué tipos de cáncer pueden comportarse de manera mucho más agresiva en los pacientes más jóvenes, y por qué el estrógeno, tiene un efecto muy diferente en las células de cáncer en las mujeres jóvenes y mayores. Hay algo diferente acerca de los cánceres de mama en adultas jóvenes que en las personas mayores.
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