miércoles, 2 de enero de 2019

LA SEGUNDA GRAN REVOLUCION FEMENINA


Una pequeña pastilla puede tener el mismo efecto que la bomba atómica”, publicaba en el año 1999 la revista Newsweek. Un artículo sobre los 10 inventos más importantes de los últimos 2.000 años ponía a la píldora anticonceptiva como invento revolucionario al lado de la bombilla, la bomba atómica y otros tantos.

El 11 de mayo de 1960, la Food and Drug Administration aprobó la venta de Enovid, la primera píldora anticonceptiva oral, no fue hasta agosto del mismo año que comenzó a comercializarse. La introducción del uso de la píldora como método anticonceptivo supuso la revolución social y económica más significativa de finales del siglo XX.

Hace 100 años las mujeres no podían votar, ni usar pantalones, tampoco formar parte del ejército, o divorciarse. Y por supuesto, no podían ni tenían herramientas para controlar cuándo tener hijos. No existía la planificación familiar, pero ha habido muchas personas a lo largo de los últimos 100 años que han contribuido a que las mujeres de hoy, y nuestras hijas, no tengamos que plantearnos estas cuestiones.

En 1916 Margaret Sanger, enfermera estadounidense activista en defensa de la prevención del embarazo, abrió en Nueva York la primera clínica de control de natalidaden los Estados Unidos. Esto condujo a su detención, y posterior liberación tras apelación, por difundir información sobre los métodos anticonceptivos, lo cual generó un enorme apoyo a su causa. Sanger consideraba que, la verdadera igualdad de la mujer exigía poder disfrutar de una maternidad libre, la mujer no sería libre hasta que no pudiera decidir por sí misma si deseaba ser madre, y cuándo y cuántos hijos quería tener. Posteriormente conseguiría financiación para la investigación sobre la píldora, que años más tarde comenzaría a estar disponible para su uso, cambiando así el destino de la sociedad y de las mujeres para siempre.

No hay comentarios: